Mariko Mori es una artista japonesa multimedia que trabaja con performance, diseño de moda, videos y fotografía. Asentada en Tokio y Nueva York, en su obra explora el contraste entre oriente y el occidente, sintetiza dos mundos en una visión hiperrealista. Sus intereses por el budismo y el shintosimo japonés están reflejados en sus trabajos, así como también la tecnología, la manipulación digital de la imagen, la ciencia ficción, el techno y el Neo-Pop, los comics y la publicidad.

En sus primeros trabajos fotográficos, Mori posa ella misma como una mujer cyborg, vestida en un reluciente traje plateado de hi-tech, rodeada por japoneses de la vida cotidiana: en un tren subterráneo que, por como la foto esta tomada, parece como un UFO circular (Subway, 1994); frente a un edificio de oficinas, donde ofrece té a los hombres de negocios que transitan (Tea Ceremony III, 1995); o como una mezcla entre la Barbie y la mujer mecánica de Metrópolis de Fritz Lang (Play with me, 1994).

La instalación de fotos 3D “Birth of a star” 1995, marcó un punto de inflexión en su obra. Se trata de ella en un fondo blanco, mientras unas bolas de colores flotan a su alrededor como estrellas. Viste pollera corta, medias plásticas y unos auriculares de gran tamaño, parece una ídola pop generada por computadora.

Desde ese entonces, sus fotografías y videos fueron producidos por equipos y asociados, con la ayuda de numerosos asociados. Ella funciona siempre como directora, escritora y muchas veces actriz y cantante en sus obras de cyber-realismo.

Miko no inori (Mori en un aeropuerto de Japón)

Dream Temple (1999). Dentro de la construcción se desarrolla una proyección de video de imágenes abstractas, en algún lugar entre ingeniería genética e imágenes oníricas futuristas.