Panorama de Barker
El panorama de Barker es una pintura circular de gran tamaño que permiten ver una imagen en 360º. Fue inventado en 1787 por Robert Barker (1739 – 1806), un pintor irlandés de retratos cuyas primeras exhibiciones no tuvieron éxito. Sin embargo, no abandonó su proyecto y en 1794, inauguró una sala panorámica en Londres que hasta su cierre, el 12 de diciembre de 1863, atrajo una enorme cantidad de espectadores.
A partir del siglo XIX, el Panorama se convirtió en una forma independiente de entretenimiento en Europa y en múltiples ciudades americanas. Este tipo de representación es el resultado de un cambio fundamental sobre la forma de percibir el mundo: el espectador, al estar en el centro, puede controlar todo lo que le rodea. De hecho, la palabra «panorama» procede del griego pan y horama (‘visión global’).
Estas pintura panorámicas se encontraban habitualmente en un edificio circular especial. Para verlas, los espectadores entraban por un túnel para situarse en una zona o plataforma, de manera que estaban rodeados por la pintura e imaginaban que formaban parte del paisaje. El Panorama representaba todo tipo de escenas, y al ser un elemento nuevo distintivo, el público quedaba muy impresionado y tenía la sensación de ver algo real.
Como resultado del éxito que tuvo con el público aparecieron diversas versiones posteriores, como el Diorama, Cineorama, Mareorama y Kaiserpanorama. Se considera al Panorama el precedente de los modernos medios de comunicación de masas, de las tecnologías de la realidad virtual y de los dispositivos fotográficos y cinematográficos que iniciarían su andadura en el siglo XIX. También fue el precursor de los noticiarios en las salas de cine de la década de 1930/1940, en el que se mostraban imágenes de las últimas noticias y acontecimientos antes del comienzo del film. En 1812, por ejemplo, un Panorama de Berlín representó el incendio de Moscú tan sólo tres meses después de que ocurriera.