Anicka Yi, (Corea del Sur, 1971), artista conceptual cuyo trabajo se encuentra en la intersección de la fragancia, la cocina y la ciencia.

Sus instalaciones que involucran los sentidos, especialmente el olfato, y por sus colaboraciones con biólogos y químicos. La crítica de arte Caroline A. Jones usa el término “bio-ficción” ppara describir el trabajo de Yi, quien describe sus trabajos como una exploración, “una biopolítica de los sentidos”. Su trabajo tiene influencia y se dice que es una continuidad del de Joseph Beuys y Marcel Duchamp, entre otros.

En su práctica, Yi usa el olor y el tacto como medios para reconfigurar los términos epistemológicos y sensoriales de las artes visuales. Utiliza materiales poco ortodoxos, a menudo vivos y perecederos, que incluyen: flores fritas en tempura, lienzos hechos de jabón, cabezales de ducha de acero inoxidable, pastillas de aceite de pescado, sandalias Teva ralladas hervidas en leche en polvo retirada y bacterias. El curador David Everitt Howe escribe que esta “mezcla incongruente de medios” está “organizada en algo elegantemente alegórico sobre las diversas industrias que constituyen nuestra identidad“.

En muchas entrevistas, Yi ha explicado que considera que su trabajo con el olfato es una respuesta feminista al trabajo centrado visualmente que está diseñado alrededor de la mirada masculina.

En su muestra de 2015 en The Kitchen en la ciudad de Nueva York, You Can Call Me F , Yi tomó muestras de 100 mujeres y, con la ayuda del biólogo sintético Tal Danino del MIT , cultivó la bacteria en una superficie de agar para ayudar a responder pregunta “¿A qué huele el feminismo ?”.