Sonia Cilliari explora la integración de distintas formas de diseño como el arte, la arquitectura, los múltiples medios y la ciencia, sobre la cual y en base a la  experimentación y la búsqueda, la llevaron a realizar arquitectura efímeras, diseños experimentales y ambientes inmersivos.

Se Mi Sei Vicino (If you are close to me), la instalación de Sonia Cilliari realizada en 2006, es exhibida en museos de arte contemporáneo, esto se da, porque la instalación surge como una nueva forma artística posmoderna, fuera de los parámetros de los museos tradicionales. Son expuestas en salas exclusivas para la obra, esto se debe al espacio que ocupa la instalación, y en estos casos son pensadas en relación a estas salas, como lugares aislados. Las salas utilizadas como contención de la pieza, son también parte de la obra, es decir el continente, pasa a formar parte de su contenido, trayendo como consecuencia un proceso de “desemantizacion” de la experiencia visual, permitiendo un único y gran espacio que permite una máxima flexibilidad. Es por esto que encontramos salas amplias, sin ventanas, lo denominado “cubo blanco”.

Esta obra pertenece a la corriente artística del arte contemporáneo de la performance, en donde se utiliza a un interprete ( sujeto ) como medio de interfaz. Al ingresar al espacio lo primero que podemos observar es una mujer situada en el medio de la sala sobre una pequeña tarima cuadrada, cuyo centro a su vez esta delimitado por un cuadrado mas pequeño, esta vez realizado con pintura blanca, donde dentro de el se encuentra la interprete. Por otro lado dos paredes de la sala disponen de  pantallas las cuales reproducen una especie de campo electro magnético captado por sensores dispuestos en la tarima vinculados con la interprete. El espectador, al ponerse en interacción con la obra puede percibir la libertad para transitarla, sin un recorrido pautado, al observarla se pueden ir apreciando el resto de los medios utilizados como, los sensores de movimiento que registran tanto a la interprete, como al espectador cuando interacciona al rededor del cuerpo, estos cambios son proyectados simultáneamente en  las pantallas, a su vez los parlantes emiten sonidos vinculados con los movimientos previamente captados por el sensor, los cuales se agudizan al haber un mayor contacto entre espectador e interprete. De esta manera el espectador se convierte en parte de la instalación al poder interferirla y cambiarla con su presencia, pasa a convertirse en otra interfaz de la performance.

Sonia Cilliari intenta, mediante la persuasión, que el espectador logre romper con los prejuicios del contacto físico, para lograrlo, este debe sumergirse en la experiencia y cobrar el valor para empezar a jugar, experimentar con la instalación ya que se crea un ambiente que podemos ubicar entre lo literal y lo imaginario. Ese nuevo sentido que se produce en la unión de medios, la iluminación, el sonido, las proyecciones, la disposición y ubicación en el espacio, hacen que el espectador quede inmerso en la obra, potenciado por el continente, que es gran parte del contenido. El uso de estos medios hacen de la obra una instalación, en donde se requiere de una experiencia con todo el cuerpo, de un espectador atento que se relaciona con la obra desde lo visual, lo auditivo, el tacto y el movimiento por la misma.

La artista plantea un tiempo de expectación libre, subjetivo a cada receptor, al no encontrar un recorrido pautado sumado a la multiplicidad de medios y la dimensión, no podríamos decir que se pensó en un tiempo para que sea percibida la obra, esto dependerá de la experiencia del espectador.

Fuentes:

http://www.soniacillari.net

https://www.youtube.com/watch?v=YFLLqwgz8q0

http://blog.scottlogic.com/2016/05/25/Body-as-Interface.html