Spatial Sounds (100dB a 100km/h) es una instalación de audio interactiva realizada en el año 2000 por los artistas de sonido e interactividad holandeses Marnix de Nijs y Edwin van der Heide.

En esta instalación con motor, un parlante está montado en un brazo robótico giratorio de varios metros de largo. Como un perro guardián, la máquina escanea el espacio circundante para detectar a los visitantes. Mientras el brazo giratorio balanceándose en círculos se escucha el sonido del poderoso motor acelerando, girando cada vez más rápido. Se puede sentir el desplazamiento del aire cuando el parlante pasa zumbando frente a los espectadores. La máquina se ralentiza y, cuando desaparece el impacto, comienza a explorar el espacio, con sus movimientos manipulando el sonido que produce.

Spatial Sounds (100dB a 100km/h) desarrolla una relación físicamente tangible con el visitante, ya que es el juego de atraer y repeler entre la máquina y el visitante lo que determina su sonido y movimiento.

La instalación:

Sonidos espaciales (100 dB a 100 km/h) consiste en un altavoz en un brazo largo con un contrapeso en el otro extremo. El brazo puede girar y puede regularse entre velocidades muy lentas y muy altas, con un máximo de 100 km/h. Un sensor de medición de distancia de alta velocidad se monta cerca del altavoz y mide el espacio circundante. Escanea cualquier objeto y visitante en este espacio. Debido a que está girando, crea una representación espacial del espacio, lo que da como resultado un mapa dinámico en constante cambio, bastante similar al radar tradicional.

Spatial Sounds (100dB a 100km/h) es una instalación interactiva con comportamiento inteligente. El brazo no solo puede girar rápida o lentamente, sino que también puede realizar movimientos muy definidos en ambas direcciones. Por un lado, Spatial Sounds (100dB a 100km/h) tiene vida propia; por el otro, reacciona muy directamente a las personas en el espacio. El sensor puede detectar qué tan cerca están los visitantes y dónde están en relación con el brazo. Cuando la instalación escanea el espacio, hace inspecciones de movimientos y genera sonidos que simbolizan este escaneo. Produce pulsos notablemente cortos y ruidosos y “escucha” las reverberaciones del espacio vacío. Los pulsos combinan diferentes rangos de frecuencia y patrones rítmicos. Cuando los visitantes entran a la sala, se detectan de inmediato. La instalación reacciona tanto musical como gestualmente. Los sonidos se relacionan directamente con la posición del brazo y el “mapa” dinámico del espacio y los visitantes. Estos sonidos son muy físicos. Por ejemplo, cuando el hablante señala a alguien, generará un sonido específico. Este también es el caso a altas velocidades y con varias personas en la habitación. Sin embargo, los sonidos y movimientos del brazo también tientan a los visitantes a moverse. Las diferentes ubicaciones en el espacio representan diferentes sonidos, al igual que la distancia de los visitantes al brazo giratorio.

Detalles técnicos:

El sonido y los movimientos de Spatial Sounds (100dB a 100km/h) se generan en tiempo real, y los algoritmos para generarlos se definen con mucha precisión. Sin embargo, los sonidos reales dependen en gran medida de lo que hagan los visitantes con la instalación. En la parte superior del altavoz hay un sensor de sonda que mide la distancia entre los visitantes y los objetos y el altavoz. El sensor toma sus medidas de un haz que mira al otro lado del altavoz, y también hay un sensor de ángulo montado en el eje de la instalación. Los datos de ambos sensores se transmiten a la computadora que genera el sonido. Cuando la instalación se coloca en una habitación, primero se entera de la forma de esta habitación cuando aún está vacía. De esta manera, puede distinguir entre las personas en un espacio y el espacio mismo. A partir de entonces, la computadora puede reconocer los diversos visitantes al espacio.

Spatial Sounds (100dB a 100km/h) reacciona de diferentes maneras con sus visitantes. Puede reaccionar al comportamiento de individuos o visitantes en general con movimiento y/o sonido. Además de reaccionar ante los visitantes, el sonido también está directamente relacionado con la velocidad del brazo y la forma de la habitación que lo rodea.

La obra ha obtenido los siguientes premios:
1er precio, concurso artístico de arte Art Future, Taipei, Taiwán, 2000
Mención de honor, arte interactivo, Ars Electronica Festival, Linz Austria, 2001
Mención de honor Transmediale, Berlín, 2001
Mención de honor, Vida 5.0 Concurso Internacional de Vida Artificial, Madrid 2002